Anoche, cuando Buenos Aires ardía con una manifestación espontánea en contra del discurso de Cristina Kirchner, TN, el canal de noticias de Clarín, se tomó una hora y media más que Crónica TV para poner en el aire el acontecimiento más asombroso de los últimos tiempos en la vida social y política de la Argentina. El diario Clarín de hoy le dedica las páginas 6 y 7 al cacerolazo. En la página 3 va el discurso de Cristina con foto de Cristina y en la 4... ¡otra foto de Cristina con el discurso de Cristina!
La noticia era la reacción al discurso, no el discurso. Por eso, el título de tapa de Clarín es mejor que el de La Nación (crítico con el gobierno). Cacerolazo tras el duro discurso de Cristina indica más la reacción de la gente en contra de la presidente y soslaya los incidentes que sólo intentaron restarle protagonismo a la pureza de la manifestación de ciudadanos en varios lugares de Buenos Aires y del interior de la Argentina.
Me imagino la redacción de Clarín en estos días. Las charlas de pasillo, los cabildeos, las bajadas de línea y las agachadas de cabeza. Los llamados desde las gerencias y los aprietes. Es evidente el poco apego a la verdad y a la credibilidad del diario. Eso se paga con circulación: Clarín viene perdiendo ejemplares de modo sostenido y preocupante en los últmos años. El promedio anual de ejemplares vendidos en 2005 fue de 416.887 ejemplares; en 2006 de 407.352 y en 2007 cayó a 388.849. Cuando te das cuenta casi siempre es tarde...
Ni me quiero imaginar, en cambio, el ambiente súper pesado en Página 12, al que su fundador, Jorge Lanata, llama hoy Boletín de Adoctrinamiento Oficial. En El Territorio quisimos mostrar la espontaneidad de la manifestación provocada por el discurso de Cristina.