La convergencia es el otro gran tema de la inteligencia colectiva que anticipaba en el post del pasado 29 de abril. Convergencia se llama ahora al trabajo mancomunado de los que producen contenidos en un mismo grupo multimedia. Antes se lo llamó sinergia y también se aplicó -como ahora- al trabajo sincronizado de la gerencia comercial con la redacción. Pero ahora la palabra convergencia se está aplicando especialmente a la relación entre la redacción del diario y la del sitio de internet. En buen romance significa unificar las dos redacciones bajo un solo comando y ahorrar dinero en la producción de contenidos. Pero hay una segunda intención: tomar posiciones para un posible cambio del papel a la pantalla.
Esta convergencia es una moda que están exprimiendo al máximo los consultores, como siempre que hay temor al futuro en las empresas periodísticas. Está basada en un principio que Nicholas Negroponte describió en Ser digital como las diferentes corporizaciones del mismo mensaje.
Pero con la excusa de la convergencia se atenta contra la competencia en las redacciones, se alientan los medios clones, el periodismo commodity, el aburrimiento y la sobrecarga en los contenidos. Una cosa es aprovechar al máximo la inteligencia colectiva y otra exprimir a los periodistas hasta agotarlos. Además, para que haya inteligencia colectiva debe haber primero inteligencia. Con data entries no se consigue más que la suma exacta del material que trasladan de un lado al otro. Ni cooperación ni confrontación: aritmética.
1 + 1 = 2
Redacciones y público, en Paper Papers, 30/4/08
Inteligencia colectiva, en Paper Papers, 29/4/08
Dónde encontrar periodistas, en Paper Papers, 27/12/06
Informar es producir hechos, en Paper Papers, 12/10/06
Quién es un periodista, en Paper Papers, 27/11/05