Si la inversión que Carlos Slim hizo el año pasado en The New York Times vale ahora menos de la mitad ¿por qué le interesaría colocar más dinero ahí?
El argumento financiero no se puede descartar pues así, barato, ha comprado antes en Apple, Saks Fifth Ave. o Citicorp. Además en este caso las acciones preferenciales le garantizarían un dividendo anual.
Y aunque esta vez la amenaza se ve tremenda, la técnica de rescatar empresas para operarlas con ganancias sostenidas le ha caracterizado desde el inicio de su carrera.
Pero existe otra posibilidad: Que tras la inversión financiera venga la inversión estratégica y la apuesta sea por el periodismo de calidad como oportunidad lucrativa. Que invertir en el NYT, The Independent o su rumorada participación en PRISA sea su entrada gradual en un nicho complementario a sus actividades.
Sus más de 100 millones de clientes en telefonía móvil y fija en América Latina pueden constituir audiencias potenciales muy atractivas ante la consolidación de la banda ancha y el triple play (voz - datos - video) como estándares del mercado de las telecomunicaciones.
Él parece tenerlo claro. En septiembre ya lo dijo: It's not what you think. What's declining is the paper. Not the news. News, information, content – well, look at the sucess of Google. And I think The New York Times is doing a good job in the digital information area.
El tan buscado nuevo modelo de negocio del periodismo no parece estar a la vista hasta ahora. ¿Llegará por el rumbo de combinaciones plataforma-contenido?
1 comentario:
Slim debería leer PaperPapers. No porque no sepa, sino porque estamos de acuerdo hace rato. Bien.
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