viernes, 31 de julio de 2009

¡Revistas contra Diarios!

Condé Nast no pagará los diarios a sus empleados, ni reembolsará las suscripciones ni los abonos a Hudson News (una cadena de quioscos). Desde hoy mismo. ¿Es así como quieren salvar a las revistas? ¿Hundiendo a los diarios? (¡Es la guerra!) No. Quizá es la primera medida que les ha aconsejado McKinsey. Muy bien, señores. Pues sí: el que tenga vicios, que se los pague.

Volver al siglo XVII

Hugo Chávez hace lo mismo que las dictaduras militares que asolaron el continente en el siglo pasado. Pero ahora, con esta ley contra los delitos mediáticos, está retrocediendo a la época del Rey Sol.

Se me ocurren tres cosas y las digo:

1. Los gobiernos hegemónicos de América Latina confunden información con periodismo, igual que muchas empresas informativas. Para ellos los medios son un ojo sin cerebro, la verdad es decir todo (también las mentiras) y periodismo es informar al pueblo lo que el gobierno quiere.

2. Los pueblos gobernados por esos dictadores se dejan violar casi sin resistencia. Parecen narcotizados o dormidos. La pobreza y la ignorancia del pueblo es presupuesto básico para que haya dictaduras. Y la prensa tiene gran parte de la culpa.

3. Las nuevas tiranías americanas saben que lo único que puede oponerse a su proyecto hegemónico es la prensa independiente. Y no sé si las empresas de medios lo saben: por lo pronto muchas optan por pactar con el poder para subsistir. Allá ellos: no se los puede acusar de no ser heroicos. Pero viene un tiempo de periodismo con agallas y de prensa prócer, como la que fundó nuestras democracias.

jueves, 30 de julio de 2009

No pasaría nada

¿Qué pasaría si nos quedamos sólo con los periodistas? Por lo pronto miles de data entries que pueblan los diarios harían piquetes interminables. ¿Además de eso, qué? Quizá sea la parte que no contemplan los de Mizzou en su análisis, pero es que no se trata de reducir la plantilla sino se sacar a los que molestan, como echar a los carpinteros de la panadería. Es lo que me planteo después de leer este artículo en el NYT de hoy.

Journalism Isn’t Dead. Just The Old Business Part Of It.

miércoles, 29 de julio de 2009

El jefe de prensa o chequista en jefe

Manuel Fran, jefe de prensa del ministro español de Trabajo, amenaza a un periodista por cumplir su tarea: preguntar e informar. "Voy a pedir quién eres para evitar que vengas a ese ministerio", le dice. La actitud de chequista, mal. La incultura profesional, peor.

Caradura infinita

Steve (¡Developers-Developers!) Ballmer, el baranda de Microsoft, dice:
“Through this agreement with Yahoo, we will create more innovation in search, better value for advertisers and real consumer choice in a market currently dominated by a single company.”
¿Microsoft favoreciendo la innovación y la capacidad de elección del consumidor? Ya. Acerca del "mercado dominado por una única compañía"… qué rostro, vaya sangre fría.

martes, 28 de julio de 2009

Esto no se hunde, lo hundimos

D* pasa un enlace a nacho.tv, donde su autor, Nacho Correa, le mete estropajo a la crónica de El País sobre el concierto de Bruce Springsteen en Bilbao. Esa crónica contiene errores garrafales. Por ejemplo, que tocó un señor que murió hace más de un año. El propio diario publicó esto:
Y dice Nacho:
[…] Si en nueve párrafos de un artículo cometes tres errores… No sé. Es muy serio. Estamos hablando de un periódico de tirada nacional. Que te lee mucha gente… Mucha gente que paga por leerte… Que no es el 20 minutos –con todos mis respetos, visto lo visto…

Y muchos estaréis diciendo que ya se me está yendo la pinza… Que total, son pequeños errores. Que da igual… Que en la línea general del artículo, ¿qué más da?

Ya… pero es que son tres errores que están. Que yo sé que son errores. ¿Qué pasa con el resto de noticias del periódico? ¿Llevan también tres errores cada una? ¿O son dos? ¿O son cuatro?
Comenta D*:
Què passa quan en un concert on hi ha milers de persones, va un periodista de prestigi (?) i l'únic que veu sobre l'escenari és un músic que va morir fa un parell d'anys? I després confon Chuck Berry amb Luke Perry?

Fa uns anys, els periodistes es podien "permetre" escriure carallotades perquè ningú no els podia replicar. Avui, aquestes carallotades ràpidament ténen resposta a la web. Se suposa que un ha d'estar més atent que mai a les fonts d'informació, a contrastar dades... La credibilitat és més vulnerable que mai. Cal fer un esforç extra.

L'amic Mantilla és un clar exemple de periodista que no ha entès on som i què passa.

Esto no se hunde, lo hundimos...

Usina de ideas

No se si es dislexia, pero desde chico confundo la Avenida General Paz con la Panamericana y digo siempre una por otra. También me pasa con otros nombres y sé que aún pensando bien lo que voy a decir, los termino diciendo al revés. Eso me pasó ahora y ya los confundiré sin remedio: La Fábrica de Ideas de Xabi Díaz de Cerio y sus compinches con La Máquina de Ideas de Carlos Echeverry y compañía ¿O es al revés?:

lunes, 27 de julio de 2009

El peor remedio: tocar la redacción

Resultados del análisis de los datos del año 1999 correspondientes a 327 diarios norteamericanos de menos de 85.000 ejemplares de difusión. Elaborado por el Reynolds Journalism Institute de la Universidad de Missouri:

Reducir el presupuesto de la redacción es el peor ajuste. Un recorte del 1% en la redacción ocasionó una caída del 0,44% en las ventas. El mismo recorte en el área comercial (venta de publicidad) ocasionó una caída del 0,24%; un 1% de recorte en el área de distribución causó una caída del 0,08% en las ventas. En diarios con una circulación media de 13.000 ejemplares, una reducción del 1% en la redacción ocasionó una reducción de 10.000$ en gastos pero los ingresos cayeron en 23.000$ y los beneficios se redujeron en 3.000$. Un recorte del 1% en el área comercial redujo los gastos en 8.000$ pero los ingresos cayeron en 12.500$ y los beneficios en 600$. Por último, el mismo recorte del 1% en el área de distribución redujo los gastos en 6,400$ pero ocasionó una caída de 4.000$ de los ingresos y un ligero aumento de beneficios.

Cuanto mayores son los recortes, peor es su impacto en los ingresos. Por ejemplo, un recorte del 10% en los gastos de redacción ocasionó una caída en los ingresos por suscripciones del 5%; un recorte del 50% ocasionó una caída del 30%.

Los recortes en la redacción son los que más afectan a los beneficios. Un recorte del 5% en los gastos informativos ocasionó una caída del 1% en los beneficios. El mismo recorte en el presupuesto del departamento comercial causó una caída de los beneficios del 0,3%. De nuevo, un recorte del 5% en el área de distribución causó una rebaja del 0,2% en los beneficios. Del mismo modo, un recorte del 50% en los gastos informativos llevó a una caída del 40% en los beneficios, comparado con una caída del 22% cuando ese recorte se aplicó al departamento comercial.

Conclusión: "Los recortes del presupesto en la redacción son mucho más dañinos para los ingresos de un diario que los recortes en el departamento comercial o de distribución".

El Ala Oeste de verdad (7)


Brian Williams (MSNBC) entrevista a Obama. Final de la serie.

El Ala Oeste de verdad en Paper Papers 4/6/09
El Ala Oeste de verdad (2): masaje de Obama en Paper Papers 25/6/09
El Ala Oeste de verdad (3) en Paper Papers 29/6/09
El Ala Oeste de verdad (4) en Paper Papers 6/7/09
El Ala Oeste de verdad (5) en Paper Papers 13/7/09
El Ala Oeste de verdad (6) en Paper Papers 20/7/09

domingo, 26 de julio de 2009

Esto es periodismo

Periodismo sin aditivos ni colorantes en esta portada/tapa de hoy. Información y sólo información [clic > ampliar]. A veces basta con averigüar los puros/meros/pinches/simples datos. Y dejar que la gente piense lo que quiera. Además del título, cualquiera de los diez subtítulos/bajadas servía para abrir. Y sólo El Universal lleva esta información. El resto de diarios hablan de otra y la misma cosa y además le dicen de quién están a favor. Una pena.

Un gráfico de 100 años

Ayer se cumplieron 100 años del primer cruce aéreo del Canal de la Mancha. L'Illustration publicó en 1909 la historia de la hazaña de Louis Blériot y de los otros que lo intentaban aquel verano. Y este gráfico (clic->ampliar):

La infografía es lenguaje periodístico tan antiguo como la prensa (mucho más viejo que la fotografía).

Cuando encontré en un trastero los números encuadernados de 1908 y 1909 de L'Illustration, subí la historia y el gráfico: La hazaña de Blériot, en Paper Papers, 6/12/08

Venganza

Salimos con S* de El Estrecho, al fondo de Sarandí, pasada la catedral. Ante un quiosquito, señala la tapa de la Rolling Stone argentina y dice:

—¿Qué es eso? ¿Una venganza contra Michael Jackson? Este mes no la compro.

Y vos no sabés lo peor… tomaron la ilustración de la RS 506 norteamericana… ¡de septiembre de 1987!

Uno piensa que la muerte de Jacko se merecía al menos quince minutos de pensamiento de los editores de RS Argentina. Vaya panda de vagos. Una pereza que no respeta ni a los muertos.

sábado, 25 de julio de 2009

La magia, las historias y la exclusiva

En el post de anteayer me jugué por la magia de las historias, animado por la comprobación empírica de las preferencias de los lectores en la web del diario. Por un comentario de FA entiendo que puede parecer contradictorio con la misión de los periódicos ¿Se debe dar prioridad a lo que piden los lectores: crónica roja, historias mágicas, farándula...?

Ni el periódico ni el periodismo dependen de los caprichos del público, como no dependen de los del poder. Es al revés. Los periódicos y el periodismo forman opinión con el fin -sagrado- de mejorar nuestras sociedades. Y lo hacen con historias, con magia, con crónica roja, con política y economía, con análisis y opinión, con farándula y deportes, con primicias y exclusivas.

Las primicias fueron apenas un episodio en la historia de los diarios. Hace mucho tiempo que han dejado el lugar de las noticias a otros medios mucho más inmediatos. Pero puede ser que la confusión entre primicias y exclusivas haya extraviado la misión del periodismo desde el tiempo en que eran fenómenos muy parecidos.

Quizá atraigan menos la política y los políticos que las historias mágicas, pero es parte esencial de la misión de un periódico informar de los actos de gobierno y de los negocios del poder. Y vaya si hay exclusivas e historias increíbles en las secciones de política de los diarios que no se conforman con las ruedas de prensa. En el resto de las secciones nos hemos acostumbrado más todavía a las gacetillas, a los calendiarios y a lo que trae el día. Muy mal. Hay historias apasionantes para descubrir en la vida del ciudadano más gris. Y detrás de esas historias hay grandes verdades que conmueven al lector más insensible.

Cuando alguien en la redacción dice que no ocurren cosas, es que no sabe buscarlas (no lo llamo periodista porque no lo es).

Trabajo práctico: Lea una historia de Jorge Fernández Díaz en La Nación de Buenos Aires. Hay para elegir: La mujer que entró y salió del infierno; El exorcista de la calle 6; El chico que tenía dos nombres y dos madres; Rescatando al sargento Villegas. También se puede escoger entre las de Manuel Rivas, Oriana Fallacci, Jorge Edwards, Arturo Pérez-Reverte, Ryszard Kapuściński, Miguel Maura, Thomas French, Mariano José de Larra, Tom Wolfe, Truman Capote, Andrew Graham-Yooll, Gabriel García Márquez, Ignacio Ezcurra, Francisco Febres Cordero y mil periodistas más. Después imagine que esas historias se publican en el periódico y un día o una semana o un año después aparecen en la web. Más: que la web anuncia esas historias para que los lectores las busquen en el diario.

El negocio del periodismo (1), en Paper Papers, 13/2/09

Dos buenas noticias

La primera: los precios de la publicidad online suben. ¡Bien! Lo dice Pubmatic, una advertising analytics de Silicon Valley. Vean:La mejora en el análisis de los usuarios y de sus rutinas de online ayuda a anunciantes y centrales a mejorar su capacidad de seleccionar los sitios adecuados y los sitios pueden vender mejor sus nichos. Empresas como BlueKai y Turn ayudan a separar el grano de la paja en el gigantesco inventario de publicidad que sitios como Facebook o MySpace vienen inflando aunque su eficacia comercial sea, de momento, casi nula. Esas analíticas están desenmascarando exactamente quién vende y quién no. En lugar de compar muchos avisos baratos, compran avisos premium directos a la audiencia deseada. Rajiv Goel, el CEO de Pubmatic, lo tiene claro: los clientes pagan más si el anuncio és más eficiente.

La segunda: The NYT aumentó sus beneficios un 85% el pasado trimestre respecto al anterior. Contra toda previsión. Ojo: los ingresos cayeron un 25% respecto a las previsiones de los analistas. ¿Se debe sólo a control de costes? Ya veremos. Periodismófobos: ajo y agua.

[Via El Editor Independiente]

viernes, 24 de julio de 2009

Por qué cierra un diario

El cierre del Ann Arbor News no quita el sueño a casi nadie en Esta Casa. Pero ha levantado un interesante debate en la ciudad. Espigueo en un blog local y traigo acá algunas perlitas de entre los comentarios:
:: Designated Conservative dice: I love newspapers, and wanted to love the Ann Arbor News. Unfortunately, the News' leadership lost touch with their readership a number of years ago. The paper failed because it became irrelevant to its current and future readers. Not because of technology and the Internet, but because of a failure of leadership.

:: Don dice: […] I'm not sure readership is the issue. Ads pay for the news. Newspapers across the country are losing ad revenue. And this is Michigan, where the economy has vaporized. The largest employer, the University of Michigan, doesn't need to use The News to advertise its events, jobs, or anything else. In fact, most of its listings are run for free, like the newspaper would for any non-profit or community group.

:: Tom Gantert dice: I am a reporter for the Ann Arbor News.
The problem has nothing to do with the paper's management losing touch with the readers. The problem isn't with readers tuning us out.
It's advertising and how technology has changed that aspect of business.
[…] You will not find a newspaper in this country that is doing better today than it was 15 years ago.
Not one.
You can't blame that on The Ann Arbor News.
Interesante como el reportero acaba por dar la razón a Designated Conservative pero rechaza su responsabilidad. La misma esquizofrenia que uno advierte en colegas aqui y allá. Cierran los diarios y nadie tiene culpa. Es el hado, el destino... Absurdo. [Via El Gran Carlos.]

Se vende sede

Ann Arbor es una ciudad de Michigan cuyo carácter universitario contrapesa el ambiente de otras ciudades de ese estado –Detroit, Saginaw, Dearborn, Flint…– dedicadas en cuerpo y alma al automóvil. Pues bien, se queda sin diario de papel: el Ann Arbor News, fundado en 1835, será un sitio web con dos ediciones impresas semanales. Van a la calle 272 empleados. El maravilloso edificio del periódico [^] y su enorme parking se venden. Precio estimado: 9,87 millones de dólares.

Uno espera que al menos el edificio sea un lindo recuerdo. Ayer pasaba ante la sede de otro caído, El Diario, histórico vespertino colorado de Montevideo: la ocupa un taller mecánico que la tiene… Intentaron blanquear las letras góticas de la cabecera, pero aún se lee su sombra. Por no mencionar el templo de la 18 de Julio donde se editaba El Día, el gran matutino colorado, que es hoy un casino. Apagaron el color rojo oscuro del rótulo pero al menos lo tienen limpio.

Bien Guadalupe

Encontré el video del Enlace Presidencial del sábado pasado en el que Rafael Correa insulta a Guadalupe Mantilla y a la prensa independiente del Ecuador. Hay dos versiones en esta página de El Comercio de Quito, junto con declaraciones de Guadalupe que valen la pena.

Cree el ladrón..., en Paper Papers, 21/7/09

jueves, 23 de julio de 2009

La verdad por casualidad

Extraordinario post de Ferran Caballero en El Matí Digital. No hay más preguntas, su señoría. [Acá va íntegro e incluso dejo traducción al español debajo]:
El País és plenament conscient que d'interès públic és allò que interessa al públic i és per això que va decidir informar sobre les festes de Berlusconi en forma de serial i en entregues periòdiques. Després d'uns inicis precipitats, que els van obligar a construir arguments ad hoc per fer passar la violació de la intimitat per imperatiu deontològic, els defensors del negoci van decidir deixar reposar el pes de les seves plomes als llavis de la velina d'Addario que, en una entrevista publicada per fascicles, com és imperatiu del gènere, es va convertir en periodista d'investigació. I encara que ha trigat en fer-ho, sembla que el diari finalment pot demostrar la certesa d’algunes de les coses que ha publicat darrerament. Potser el més curiós del cas és que la credibilitat del diari, que tants dies ha estat en mans d'una prostituta de les que cobren per ser noticia i per explicar-ho, hagi acabat posant-se en dubte per la publicació d'una falsa autòpsia de Michael Jackson.

Així ho explica la defensora del lector, Milagros Pérez: La mañana del lunes 29 la edición digital de El País publicó en su portada el resultado de la autopsia: el cantante pesaba 51 kilos, tenía el estómago lleno de pastillas, estaba calvo y presentaba cicatrices de al menos 13 operaciones de cirugía estética. El subtítulo aclaraba que eso era "según el diario sensacionalista The Sun". Al final de la tarde tuvo que rectificar: "El informe de la autopsia es falso", decía el titular, a pesar de lo cual, continuaba reproduciendo su contenido. El País va publicar una informació falsa, copiada del diari britànic The Sun, i es pregunta ara si per no passar per mentider en té prou recordant que ell només copiava. Borja Hermoso, redactor en cap de Cultura, explica que es van decidir a publicar-la perquè "la noticia de The Sun sobre la autopsia se propagó rápidamente por la red y El País no podía dejar de darla".

En realitat, però, el diari no només podia deixar de donar-la sinó que la seva obligació era decidir si fer-ho o no, i el més preocupant és que l'error es justifiqui per l'absència d'un criteri clar per decidir sobre aquestes qüestions. Perquè la inmediatesa, que sembla ser la principal preocupació dels editors del digital, no és més que la negació de la raó de ser del periodisme. Perquè citar les fonts per deixar en mans del lector el judici sobre la fiabilitat de la notícia és també el contrari del que ha de fer el periodista, que en nom de la veritat pot ocultar informació però mai al revés, que pot amagar la font per publicar una notícia però mai citar la font per publicar una mentida. La premsa digital no per digital deixa de ser premsa, i la credibilitat dels diaris passa perquè no sigui només per casualitat que diuen la veritat.
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El País es plenamente consciente de que es de interés público aquello que interesa al público y por eso decidió informar sobre las fiestas de Berlusconi en forma de serial y entregas periódicas. Tras unos inicios apresurados, que le obligaron a construir argumentos ad hoc para hacer pasar como imperativo deontológico una violación de la intimidad, los defensores del negocio decidieron reposar el peso de sus plumas en los labios de la velina D'Addario que, en una entrevista publicada por fascículos, como es imperativo del género, se convirtió en periodista de investigación. Y aunque ha tardado en hacerlo, parece que el diario finalmente puede demostrar la certeza de algunas de las cosas que ha publicado últimamente. Quizá lo más curioso del caso es que la credibilidad del diario, que tantos días ha estado en manos de una prostituta de las que cobran por ser noticia y por explicarlo, haya acabado poniéndose en entredicho por la publicación de una falsa autopsia de Michael Jackson.

Así lo explica la defensora del lector, Milagros Pérez: La mañana del lunes 29 la edición digital de El País publicó en su portada el resultado de la autopsia: el cantante pesaba 51 kilos, tenía el estómago lleno de pastillas, estaba calvo y presentaba cicatrices de al menos 13 operaciones de cirugía estética. El subtítulo aclaraba que eso era "según el diario sensacionalista The Sun". Al final de la tarde tuvo que rectificar: "El informe de la autopsia es falso", decía el titular, a pesar de lo cual, continuaba reproduciendo su contenido. El País publicó una información falsa, copiada del diario británico The Sun, y se pregunta ahora si ha recordado lo bastante que sólo copiaba para no pasar por mentiroso. Borja Hermoso, redactor jefe de Cultura, explica que decidieron publicarla porque "la noticia de The Sun sobre la autopsia se propagó rápidamente miedo la red y El País no podía dejar de darla".

En realidad, el diario no sólo podía dejar de darla sino que su obligación era decidir si hacerlo o no. Lo más preocupante es que el error se justifique por la ausencia de un criterio claro para decidir sobre estas cuestiones. Porque la inmediatez, que parece ser la principal preocupación de los editores del digital, no es más que la negación de la razón de ser del periodismo. Porque citar las fuentes para dejar en manos del lector el juicio sobre la fiabilidad de la noticia es lo contrario de lo que debe hacer el periodista, que en aras de la verdad puede ocultar información pero nunca a la inversa, que puede proteger a la fuente para publicar una noticia pero nunca citar la fuente para publicar una mentira. La prensa digital no por digital deja de ser prensa, y la credibilidad de los diarios pasa porque no digan la verdad sólo por casualidad.
Menudo bluff en Paper Papers 14/6/09

La magia de las historias

Es la portada de El Territorio de Posadas del martes. Pero aquí abajo cuelgo la lista de lo más buscado en la web del diario ese mismo día a las 11 de la mañana (clic para ampliar):

Es un ejercicio FENOMENAL: ¿Qué buscan los lectores? Crónica roja, realismo mágico, Ingrid Grudke y sociales.

Pero lo que todavía no saben -porque no lo dije- es casi todas son historias propias: EXCLUSIVAS. Y a las 11 de la mañana solo estaba en la web, además del título, el copete/lead.

Los medios y la yerba mate

Es una mañana fría de y soleada de invierno en Buenos Aires. Acabo de llegar a mi oficina, bien en el centro de la ciudad. Me preparo un mate para disfrutar de los primeros momentos del día mientras leo y contesto el correo electrónico y veo los sitios que me interesan.

Me sorprende la yerba que encuentro en la alacena. Una marca que jamás compraría, no porque no sea buena, sino porque conozco a sus dueños. Y entonces pienso que, por conocer a gran parte de los molineros del nordeste de la Argentina, donde se produce toda la yerba mate que se consume en el país, decido cuál tomar más por sus dueños que por su gusto (que soy incapaz de distinguir).

Muy mal. O muy bien. Lo mismo me pasa con los periódicos y con otros medios. Los leo, veo o escucho más por sus dueños que por sus contendios. Es que primero creo o no creo en lo que me dicen sus dueños y después en sus periodistas. No es cuestión de hacer nombres (ni en la yerba ni en los medios) pero es así.

Es una deformación profesional, pero lo de la yerba me sorprende. Quizá le pasa lo mismo al lector medio. Ahora mismo no sé que porcentaje sabe quién es el dueño de cada empresa de contenidos, pero estoy seguro de que ese número va en aumento.

Y me acabo de dar cuenta que esta yerba no me gusta...

Nuevos enfoques

McKinsey está pasando la garlopa en Condé Nast. El grupo de revistas ha contrado a la consultora para "desarrollar nuevos enfoques en nuestro negocio", según explica el presidente Chuck Townsend en un memo que es un eufemismo integral desde el encabezamiento a la firma. Una vergüenza. Como si la gente de Condé Nast fueran críos.

Claro, si tratas así a tu gente no es extraño que algunos se calienten. Por eso al gran Peter Kafka, de All Things Digital, le han filtrado la comparación entre septiembre 08 y 09 de páginas de publicidad contratadas en los semanales y quincenales del grupo. Es la columna resaltada en azul. Notables los descensos en W y Traveler. Y eso que septiembre siempre ha sido un mes de números especiales y abundantes anuncios. Este es el motivo de la visita de los amigos de McKinsey y del "nuevo enfoque". Cúidense.

miércoles, 22 de julio de 2009

Chau, Janice

Buscando cómo contar que Janice Min deja la dirección de US Weekly después de agarrarla en 800.000 copias y ponerla en 1,9 millones, encuentro estas portadas falsísimas y divertidísimas en Panopticist, un blog con ciertas ínfulas que su dueño, Andrew Hearst, subtitula Vigilancia Cultural. Es muchísimo mejor que US Weekly, una revista que no sirve para nada. Ojo con los niños.

US Weekly disfrazada de Harper's
National Geographic disfrazada de Cosmopolitan

Foreign Affairs disfrazada de US Weekly

The Economist disfrazada de E! Entertainment TV

martes, 21 de julio de 2009

Yo quiero uno como este

Parte del encanto de Obama es su candidez a la hora de explicarse: es sencillo y directo. No siempre, no siempre. Pero engaña un 95% menos que otros presidentes de Gobierno y Jefes de Estado que uno conoce. Vean cómo explica su contento porque el Senado haya denegado $1.750 millones al proyecto del avión de caza F-22, "que los expertos militares y miembros de ambos partidos dicen que no necesitamos":

Cree el ladrón...

El sábado los diarios independientes del Ecuador publicaron en portada un comunicado de la AEDEP (Asociación Ecuatoriana De Editores de Periódicos)

Parar agresiones

Las continuas y reiteradas agresiones a los medios de comunicación independientes han creado un ambiente de beligerancia, que no se compagina con los derechos de libertad de expresión plenamente garantizados por la Constitución de la República y las expresas disposiciones internacionales de defensa de los derechos humanos, de las cuales es signatario el Ecuador.

Las agresiones a El Universo, a los directivos de La Hora, la violación domiciliaria, agresión a funcionarios y empleados de la revista Vanguardia, el aleve ataque a periodistas de El Comercio, los insultos infundados a diario Hoy, son ejemplos del clima de violencia que el Presidente de la República y algunos miembros de su gobierno han venido sembrando desde que se inició este periodo.

Por todo esto, es indispensable que el Jefe de Estado y los funcionarios de gobierno bajen el clima de confrontación nacional que provocan en muchas de sus declaraciones.

Los ataques a los medios independientes son la evidencia más simple de lo que la población está aprendiendo del actuar de sus dirigentes. El incremento de la delincuencia denunciado por las autoridades policiales y medios de información debe combatirse con el ejemplo de los gobernantes y la acción de las fuerzas del orden para salvaguardar las bases de la democracia.

Demandamos de los funcionarios gubernamentales la moderación que corresponde a un régimen democrático, así como las plenas garantías para el respeto a la libre expresión de todos los ciudadanos y el ejercicio del periodismo independiente.

Los sábados a las 10 de la mañana Rafael Correa protagoniza el Enlace Presidencial que se emite por radio y televisión a todo el país. El programa ya alcanza las cuatro horas de monólogo en las que el presidente relata con detalles y apostillas su agenda de trabajo de la semana que pasó. El final, con una cortina musical ad hoc lo dedica a los medios de comunicación bajo el eslógan La libertad de expresión ya es de todos. El sábado anterior, día 11 de julio, desencajado, Correa arremetió contra la prensa independiente a la que acusó de corrupta y mediocre.

La prensa ecuatoriana publica en estos días los negocios del hermano del presidente, Fabricio Correa, quien multiplicó su patrimonio en los años de gobierno fraterno gracias a sus contratos con el estado ecuatoriano.

El presidente no paró las agresiones. El sábado 19 (el mismo día de la declaración de la AEDEP) atacó a Guadalupe Mantilla, directora y propietaria de El Comercio de Quito.

Rafael Correa y el resto de los nuevos déspotas latinoamericanos juzgan a su pueblo con la vara con la que se miden ellos mismos (cree el ladrón que todos son de su condición). Lo que les molesta de la prensa es que difunda su obsceno abuso del poder y la acusan con razón porque no queda quien se oponga. Al final, como otras veces, la prensa independiente salvará nuestras repúblicas de los abusadores aunque le cueste su propia existencia. Y como otras veces nadie lo reconocerá.

Atracadores digitales

Los usuarios norteamericanos de Kindle podrán suscribirse a los tres diarios de Prisa (El País, As, Cinco Días). elpais.com da la noticia en su home con cierto destaque. Clico para leerlo y… lo de siempre. Más papistas que el papa. En "Si te ha interesado esta información, te recomendamos" no figura la última sobre Amazon: que la pasada semana borró algunas copias de 1984 y Granja Animal de los Kindle de sus clientes. Amazon carecía de los derechos del libro y entró en las bibliotecas digitales de sus clientes, eliminó el libro y devolvió el dinero. Entraron en casa de sus clientes sin pedir permiso.

¿Borrarán de El País lo que no les guste del mismo modo o el contrato protege al diario? La actitud pelota/chupamedias del diario al no ofrecer las informaciones relacionadas con Kindle porque eran malas para Amazon –y eso lo editaron a mano– le deja a uno en la duda e indefenso.

El altruismo de Google

El Bureau for Investigative Journalism (BIJ) recibirá dos millones de libras de la Fundación Potter para desarrollar periodismo de investigación independiente. Uno piensa que todo periodismo es de investigación e independiente por definición. Pero bueno, se entiende bien a qué se dedica el BIJ – y ya discutiremos sobre los conceptos otro día.

El Bureau quiere contrarrestar el declive de este periodismo en los MSM, que siguen despidiendo periodistas y reduciendo recursos destinados a la redacción. Aprovecha la buena onda tras las investigaciones periodísticas en torno a los gastos de los Comunes y a los pinchazos en los móviles/celulares de famosos. El BIJ proporcionará fondos, tecnología, editores y analistas expertos a periodistas con buenos proyectos.

Google, en un conmovedor acceso de generosidad, apoyará al BIJ "con experiencia técnica, software y entrenamiento". Con dinero, no. Peter Barron, jefe de prensa de Google en el Reino Unido y Benelux y patrono del BIJ en representación del buscador, se excusa diciendo que Google “no hace contenidos” (we don’t do content). Ya. Los hacen otros. Google sólo los hace accesibles.

Y el NYT asegura a Lindsey Hoshaw, freelance californiana, que publicará su reportaje si ella misma consigue dinero para financiárselo. Una historia que debe conocer sí o sí (¡Gracias S*!).

lunes, 20 de julio de 2009

Como sabandijas

No es fácil comprender la psicología del periodista: van corriendo de un lado para otro como sabandijas; Dios tiene confianza en ellos. A lo largo de los años van formándose una extraordinaria capacidad para localizar el lugar donde ocurrirá la próxima victoria. Si alguien da una conferencia de prensa y al final de ella no se ve rodeado de reporteros, no tiene por qué preguntarse cómo van sus cosas, porque los reporteros se lo han dado ya a entender. Por esta razón, los periodistas tienen fama de ser ellos quienes encauzan el rumbo de las cosas, y es que realmente son las únicas antenas en la concatenación de los sucesos, los tentáculos que nos indican el ritmo de la historia según va discurriendo. A pesar de todo, no hay realidad psicológica como la idea que cada uno tiene de sí mismo. Incluso cuando un escritor ha perdido lo mejor de su talento, dando, año tras año, datos que han perdido ya sus matices, es decir, escribiendo artículos de periódico, así y todo sigue teniendo una idea de sí mismo: que su atención personal puede ser vital para informar correctamente sobre un suceso determinado. Ahora bien, metamos a 500 periodistas en un cuarto para que informen sobre la fase final de un acontecimiento "cuya importancia es equivalente a la del momento de la evolución en que la vida acuática emergió a tierra", y pongamos ante ellos una pantalla cinematográfica y una transmisión televisada en la mencionada pantalla, que no solamente es el primer intento de comunicación desde un satélite situado a más de 300.000 kilómetros de distancia, sino que también, y de esto pueden estar ustedes seguros, está completamente desenfocada. Los periodistas se ponen gafas para no perderse la letra pequeña, pero una pantalla desenfocada añade una herida nueva a la llaga de la herida anterior. Algo en ellos se volvió del revés: observando la Luna en la pantalla eran como universitarios un viernes por la noche en el cine de la ciudad: no se podía predecir de qué se reirán la próxima vez, pero su sentido de lo absurdo era rápido y violento.

Esta descripción tiene 40 años. Es de Norman Mailer y la encuentro en la revista de La Nación de Buenos Aires de ayer, dedicada, como todo por estos días, a la Luna. Aclaran que es una adapatación de Moonfire (Un fuego en la Luna), el nuevo libro que Taschen ha lanzado en dos ediciones de 1969 ejemplares. (gracias MRA)

Inspiración

La portada de El País Semanal de ayer:


La portada de Esquire de Abril de 1968, de George Lois:

Obama II

En la puerta de embarque de El Prat, un papel pegado a una maleta dice:

Fernando Noé Obama, Fernando Poo.

Con la sorpresa, olvido fotografiarlo. Menudo periodista.

El Ala Oeste de verdad (6)


Obama se lleva a comer hamburguesas de Five Guys a su staff para evitar el efecto burbuja en la Casa Blanca.

El Ala Oeste de verdad en Paper Papers 4/6/09
El Ala Oeste de verdad (2): masaje de Obama en Paper Papers 25/6/09
El Ala Oeste de verdad (3) en Paper Papers 29/6/09
El Ala Oeste de verdad (4) en Paper Papers 6/7/09
El Ala Oeste de verdad (5) en Paper Papers 13/7/09

domingo, 19 de julio de 2009

Explicación

Salieron el domingo 12 de julio en las páginas 23 y 25 en este orden (o 25 y 27, no recuerdo) de Clarín y no sé si se repitieron durante la semana. PO me dice que explican que ellos siguen a la gente y no al poder. Puede ser, pero ya es todo un síntoma tener que dar una explicación. La frase La única verdad es la realidad es de Juan Domingo Perón.

Ese mismo día Clarín publicó un especial sobre Perón, con textos del general, y con motivo de los 35 años de su muerte (que no fue el 12 sino el 1 de julio de 1974) y un desplegable con la foto emblemática de Perón montado en su caballo Mancha el 9 de julio de 1950.

Qué hizo Cronkite por el periodismo

Lo explica Al Tompkins con mucho cuidado en Poynter Online. Muy bien, Al. Completísimo.

Y lo que dice la gente, en Decoder. Por ejemplo:
“I don’t believe walter cronkite has departed. not until I hear it from him!”

Hoy, con una cervecita, a media tarde…

Lea la pieza de David Simon sobre el pago en internet:
Build the Wall. Most readers won’t pay for news, but if we move quickly, maybe enough of them will. One man’s bold blueprint.
¡Todos los gurús a la violeta están que trinan! Sepa por qué están cabreados los periodismófobos.

Lo que más me gusta es esta expresión: high-end journalism.

sábado, 18 de julio de 2009

El "aplauso general" pasó a "mayoritario"

Uno piensa, muy modestamente y con ánimo constructivo, que en esta portada/tapa hay más ganas de vender la opinión del diario que verdadera información (qué pasa, por qué pasa lo que pasa y qué pasará).

Dicen en el texto que el 85% de los catalanes "han oído hablar" de la financiación autonómica. ¿Han oído hablar? Vaya. Llevamos dos años en que este asunto es el primero, segundo o tercero en la agenda de todos los medios. ¡Pues claro que han "oído hablar"! Pero ¿de qué trata la tal financiación? Si ni los expertos que han analizado el acuerdo consiguen explicar en qué consiste. Entonces, ¿qué valor tiene esa encuesta? De otro modo: ¿qué se quiere ocultar?

En esa portada hay poco periodismo y mucha propaganda, mucho framing –perdón por la pedantería. Los diarios están a favor y en contra siguiendo exactamente sus preferencias partidistas. ¿Alguno puede informar con los hechos y mostrar los argumentos contrarios? Nah. Es obligatorio aplaudir y hacer creer que todos aplauden. O todo lo contrario. Qué pena.

Ofrézcanme los hechos y dejen de decirme lo que debo pensar, por favor.

Uno sigue de cerca un debate de calado similar, la reforma del sistema sanitario público norteamericano –ahí se juega Obama su presidencia–, y se admira de la profesionalidad de la cobertura informativa de los medios USA. ¡Consiguen explicarlo ellos, sin hacer seguidismo de los políticos ni de los grupos de intereses, y dejan a la ciudadanía libre y capacitada para decir bien o mal! Nos ganan por 40 a 0.

El aplauso general en Paper Papers 14/1/09

Vaya humos

Jarvis comprueba que su libro (¡Mi Tessssoro!) no está en las librerías del aeropuerto de Minneapolis y se calienta. Es lógico. Lo que quizá no lo sea es que ventile su enfado por Twitter como una diva decimonónica ofendida:
Truly pissed. My book is not in 2 Minneapolis airport bookstore. What do publishers do?—Now I'm really fuming. How can a publisher expect a book to sell if it's not in the f*ck*ng store? What value do they add?
—In the computer age, there's no excuse for anything to be out of stock at any store.
Jeff ¿has pensado que quizá el libro no se vende porque no añade valor y los libreros no lo reponen? ¿O es que la Economía Del Enlace anula la libertad de mercado? A veces ocurre, no hagas tanto ruido.

[PD: Mal gusto también: No disrespect to Cronkite, but I am glad to be past the age of the oracle anchor.

That's The Way It Is. Walter Cronkite, 1916-2009

Howard Kurtz publica un magnífico obituario en The Washington Post. El Times hace un despliegue fenomenal y a uno le gustaría destacar esta pieza: Cronkite explicado a la generación YouTube. Hasta la vista, Viejo.

El resumen biográfico de la CBS:



Asesinato de JFK:


Asesinato de MLK:


El hombre en la Luna:


Walter Cronkite y Ben Bradlee:

Crédito para McLuhan

Siempre me entusiasmó Marshall McLuhan. Quizá por eso me da un poco de tristeza que lo ignoren tanto, justo ahora que está más actual que nunca. Es lo que le pasa a Gina Chen, de Save the Media en este post tan sugestivo: What newspapers can learn from the past. Con ese título hasta olía a San Marshall (como lo llamaba Wired en la época de Rosetto):

Something will be lost: It cannot be helped. A funny story making the rounds on Twitter lists 10 reasons you’ll miss newspapers, including their superior use as kindling. But, seriously, much more will be lost if printed newspapers cease to exist. Reading a news story online is different than reading one in print. There’s something about holding a newspaper in your hands and folding it to a usable size as you browse through a section that just isn’t the same as the serendipitous surfing on the Web. Plus, we scan online, versus read. But you cannot move ahead without leaving something behind.

Something will be gained: You can’t beat the Web’s ability to add richness to a story. It’s so much more useful to readers to link to a definition of a technical word or to background information or a related article, than it is to stick this information in a shaded box next to the story or (God, forbid) on the jump page. I remember in the 1990s when adding a graphic to your story was all the rage, and reporters complained, as if making information easier for readers to digest was somehow selling out. I think it’s tough to argue that readers can have the same interactive experience in print that they can online. They just can’t. But we can’t gain something unless we lose something, too.

McLuhan lo había dicho casi con esas palabras por lo menos antes del 31/12/1980.

Diarios y bicicletas, en Paper Papers, 17/11/08

viernes, 17 de julio de 2009

Esto sí da que pensar

Mark Potts da mil vueltas a los gurús del post anterior –aunque su comentario desprende un perfume periodismofóbico... comprensible: mucha gente inteligente está cabreada con los periodistas, con su complacencia, con su posición más de establishment que de ciudadanos… mientras los editores/dueños estaban ocupados por el precio de la acción y el próximo informe trimestral. De todo eso ya habló Allen Neuharth ¡hace casi 30 años! Decía que los periodistas hoy son más amigos de sus fuentes que de los ciudadanos a quienes deben servir.

Potts critica la aseveración de Lionel Barber (en menos de un año los MSM cobrarán por el acceso o uso de los contenidos que publiquen):
Sure, they may charge—but readers won't pay, at least not in anything resembling sufficient numbers. Not unless they see significant quality and value. And based on the current track record, there's no reason whatsoever to believe that will be the case.
¿Por qué no? ¿No vienen haciéndolo con aquello que consideran valioso? Esta periodismofobia de salón apesta a dogmatismo.

Pero va al punto (¡Felicidades!) cuando cita a un amigo periodista:
"It is time for some honest conversations about what newspapers do and why. […] The market is already telling them something they don’t want to hear: we are not sure you are worth the price. So, what are journalists going to do about it?"
¿Journalists? No sería mejor y más completa la pregunta: So, what are journalists and publishers and citizens going to do about it?

Y cita un extraordinario ejemplo de periodismo contemporáneo: fivethirtyeight.com

Adelante con el debate.

La Periodismofobia

Dice e insiste Jeff Jarvis citando un tweet de Dave Winer:
la gente importante en las noticias son las fuentes y los testigos
El sobreetendido es que no son los periodistas. Menuda novedad. Pero a él eso le sirve para construir una pieza cuyo asunto es éste:
[…] La prensa se ha convertido en la maldición del periodismo, no sólo porque ahora supone una carga de costes tremenda, sino porque nos condujo a todos estos mitos: que nosotros, los periodistas, poseemos las noticias; que somos necesarios para hacerlas: que podemos empaquetar el mundo cada día en una caja y ponerle un lacito; que lo que hacemos es perfecto (con raras, creo, excepciones); que el mundo debería de acudir a nosotros para estar informado; que nos merecemos ser pagados por este servicio; que el mundo nos necesita.
¿Qué periodista cree esos mitos hoy? Algún estúpido –nunca faltan. Pero quien considera representativo a un estúpido pone en berlina su propia capacidad de juicio.

Es pura y dura Periodismofobia. Médiaparanoïa lo llama Laurent Joffrin. Eso es lo que promueven con ahínco Jeff Jarvis, Dave Winer, Jay Rosen y cía. Los colegas reales y verdaderos –que también escarnecen al establishment mediático, ven errores y soberbias, ponen el dedo en las llagas de la profesión…– no son periodismófobos. Están demasiado ocupados construyendo el periodismo del futuro. Mientras, los antecitados no tienen más ocupación que inflar sus blogs atacando molinos de viento (como el narcisismo periodístico, por ejemplo) o fabricando conceptos y definiciones vacías, sin demostrar, sin argumento ni razón (¡Economía De La Abundancia! ¡Crowdsourcing! Etc.).

Siembran sospechas sobre todo el periodismo y todos los periodistas –sobre todo de los diarios–, a quienes sólo conceden existencia para humillarlos, molestarlos o descalificarlos. Ni respeto por la historia tienen. Gritan tanto que no oyen lo que otros tienen que decir. Hablan sólo entre ellos: ya no están en este mundo.

Qué saña. Cuesta pensar bien. Si dijera que expulsan su rencor y su resentimiento porque fracasaron como reporteros o editores y cobijaron su frustración en universidades de segunda fila donde han incubado estrafalarias teorías… Todo eso sería una enormidad y un error. No se puede. Y sin embargo así obran ellos: juzgan intenciones y conciencias, expiden licencias de periodismo bueno y periodismo malo, sueltan teóricas inaplicables... Nos perdonan la vida.

Al grano. Lo importante no son sólo las fuentes y los testigos. Eso es sólo el principio. A eso hay que agregar la capacidad de depurar esas fuentes y esos testigos, valorar el relieve de su información y construir un relato veraz y adecuado: al público, al medio, al momento.

Necesitamos profesionales con esas capacidades. Gente formada para eso. No sirve cualquiera, por muy ciudadano que sea.

Decir lo que dicen Jarvis, Winer, Rosen y cía es una sinvergonzonería intelectual del mismo calibre que juzgar idénticos al curandero de la tribu que el cirujano del hospital; el albañil del pueblo que el arquitecto municipal; un robot que cuida niños o el cariño de su madre. ¿Usted a quien está dispuesto a pagar, al curandero o al médico? ¿A su vecino que le cuenta en su blog cómo fue el consejo escolar o al profesional que lo pone en contexto? Ajá.

¿Internet amplía el número de fuentes y testigos que pueden ofrecer directamente su versión? Claro. ¿Devuelve a los ciudadanos buena parte de su capacidad de intervenir en el debate público, de ser parte de la cadena de valor periodística? Claro. Y muchas cosas más y lo que te rondaré morena. Todo eso no destruye el periodismo, lo mejora.

Lo que no cambia es la necesidad de tener profesionales dedicados a buscar y levantar las noticias, definidas á la Northcliffe: lo que alguien hace en alguna parte que no quiere que sea publicado. Todo lo demás es propaganda.

¿Elimina Internet a esos que no quieren que la gente sepa? Claro que no. Sería tan absurdo como suprimir a la policía porque existe un sistema más rápido y seguro para identificar, denunciar y prender a los criminales que puede ser manejado por cualquiera. O pensar: se acabó la tiranía de los jueces –o bien: los jueces son la maldición de la justicia– y ya no los necesitamos pues unos algoritmos emparejan pruebas a favor y en contra, definen el delito y deciden la pena. Es de 1984, vamos.

¿Hay que decir estas cosas tan… elementales? Uno malicia que por detrás de ese vinagre de los gurús hay algún trauma del pasado que les ciega… En fin. Dejémoslo estar. No tengo derecho.

Periodismófobos. Uno prefiere chanzas inteligentes y estimulantes como las de Chesterton:
Periodismo consiste en informar de que ha muerto Lord Thomson a millones de lectores que no sabían que Lord Thomson estuviera vivo.
Los problemas son muy otros, estimados periodismófobos. Y a falta de Chesterton y como no podemos contar con ustedes para resolverlos… por lo menos no metan tanto ruido. No lloren, hagan el favor.

El grano y la paja

Uno no sabe si los MSM (mainstream media) cobrarán en menos de un año por el accceso a o el uso de las noticias en plataforma digital. Nadie lo sabe. Que lo diga Lionel Barber, Director del Financial Times, tiene su fuerza. Sabe mucho. No es cualquiera.

¿Quieren los ciudadanos pagar por el periodismo stainless steel tal y como él lo describe? Es un discurso cándido y eso lo hace valioso.
Without new revenue streams, quality journalism will wither. We should be under no illusions about the price we would pay as a result. It would not be measured in terms of jobs alone, but something more enduring and valuable. Journalism forms part of the lifeblood of free societies Journalism is not perfect, nor was it ever meant to be. By its nature, it is often uncomfortable, especially for those in positions of power. But it matters - and I will defend it to the last.
El periodismo importa muchísimo, sí. Los impresos o los digitales no. Si perdemos todo eso que explica Barber, perderemos todos. La calidad de nuestras sociedades democráticas se devaluará. La vida de los ciudadanos se deteriorará. Todos seremos víctimas. ¿Resolverán el desaguisado Google, los consultores a la violeta, la blogosfera? No, dice Barber:
[...] most bloggers do not operate according to the same standards as those who aspire to and practise crafted journalism. They are often happy to report rumour as fact, arguing that readers or fellow networkers can step in to correct those “facts” if they turn out to be wrong. They are rarely engaged in the pursuit of original news: their bread and butter is opinion and comment. Their web-driven culture of immediacy means they are more often consumed by the need to be first than right. And there is a good reason for that. In the words of Michael Arrington, the influential tech blogger in California, “first is cheap, right is expensive.”
Olvídese de los detalles (¡Cobro Digital En Un Año! ¡En Dos! ¡Nunca!). Seamos serios. Nos jugamos mucho. Y los primeros responsables de la muerte o resurrección del periodismo son los empresarios de medios y, nosotros, los propios periodistas. No se hagan los suecos. Ánimo. El premio es grande.

jueves, 16 de julio de 2009

Ejército de hipopótamos

Lo mejor es que te llega así, doblada al medio y adentro de El Telégrafo de Guayaquil, la sección Mundo.

EL SF Chronicle subcontrata la impresión

Y con eso eliminan 200 puestos de trabajo. Quizá sea demasiado tarde, pero quizá… En la nota del NYT hay un excelente punto de Ken Doctor, un periodista al que uno conoció bien y del que admira sus trabajos en la reorganización de algunas redacciones de Knight-Ridder a mediados de los 90:

It’s like they zoomed ahead to the 1990s. There is some attraction for better color, for readers and advertisers, but it won’t fundamentally change the direction. The Internet is about immediacy and diversity of sources, not about seeing things in better color.

miércoles, 15 de julio de 2009

No tan rápido, forastero

Los profes se han puesto las botas con el estudio de Cornell que el NYT resumió en este titular: los medios tradicionales dan las noticias 2,5 horas por delante de los blogs. Unos ponen de relieve la limitación de la metodología, otros agregan valoraciones cualitativas –muy necesarias– y todos tienen cosas interesantes que decir y evidencias anecdóticas que agregar en defensa de la blogosfera. Bien.

Los comentarios que a uno le parecen de más valor son estos (tómelo como los deberes para el fin de semana que viene):

As for that 2.5-hour lag: since the study focuses on quotations as a sort of genetic marker for ongoing news threads in election coverage, of course the traditional media are going to have the jump on bloggers. They’re following the politicians around with microphones and notebooks. The study did find that, 3.5 percent of the time, phrases are injected into the news cycle first by blogs and then picked up by traditional news outlets. It’s certainly possible that this pattern would be found to apply outside of election news, and with a wider set of stories than those defined by political quotations. But we don’t know that.
Los blogs fueron atrás en Paper Papers 13/7/09

martes, 14 de julio de 2009

Infografermín

Pasado el último encierro de estas fiestas me divierto buscando esta pieza de arqueolgía que tengo en una diapositiva. Días antes de los Sanfermines de 1989 organizamos en Pamplona uno de los primeros talleres de infografía con Karl Gude y Jeff Goertzen. Juan Antonio Giner me había mandado a Estados Unidos a contactar a Karl y a Jeff que trabajaban en Associated Press y en The Orange County Register. También conocí en ese viaje a John Monahan (que había estado en Pamplona el año anterior) y a George Rorick. Al taller asistieron -vinisteis- todos los históricos además de Juan Antonio y Miguel Urabayen. Cada uno hizo su gráfico en unas Mac que nos prestaron los de Apple España para la ocasión y que ahora resultan antediluvianas. Al final Jeff y Karl dibujaron éste, a gran velocidad:

... y marcaron para siempre los gráficos de los sanfermines en todo el mundo y también el de la infografía en España...


Agrego un día después el origen de los gráficos a pedido de Juantxo Cruz, pero antes aclaro que no quise ponerlos porque se trataba de una recopilación apenas nostálgica de aquellos días de 1989 y de sus consecuencias. Los peris donde se publicaron o las agencias que los trasmitían daban lo mismo. El último gráfico, provocado por la muerte del corredor Daniel Jimeno, lo publicó El Mundo el pasado 11 de julio. Va completo aquí abajo, tal como lo tomé de La Iguana Ilustrada (clic->ampliar):

Los de más arriba son de Perfil, El Territorio y La Nación -todos de la Argentina- en ese orden y diferentes días y años.

Juan Antonio Giner recuerda en su comentario que el seminario se realizó los días 4 y 5 de julio y menciona a Maite Martínez (era entonces el alma de Nuestro Tiempo y de cuanto seminario, taller, congreso o concurso organizábamos). También a Roger Fidler y José Font. Además de Mario Tascón y Tomás Ondarra, recuerdo a Gerardo Amechazurra ¿Alguien más? ¿Javier Sicilia, Jaume Serra...?

Aclaro que el autor del post soy yo (gracias JAG por el recuerdo) y no Toni, que en esa época trabajaba en La Vanguardia.