Es de lo mejor que he leído sobre la Ley de Medios que se debate estos días a las apuradas en el Congreso Argentino. Hecha la Ley, de Martín Caparrós, en Crítica de ayer.
1. Comenta una "rosarina de 56 años": Martín Caparrós ¿¿¿sabe que impresión me dio su artículo???? que Ud. queda bien "con Dios y con el diablo" […]. Estoy de acuerdo.
2. Niego la mayor: no es lo mismo que las empresas de medios se comporten como bergantes a que lo haga el Gobierno. Los medios propiedad del Estado nunca funcionan –o bien: dígame alguien dónde funcionan.
3. El monopolio es una situación que construyeron del mismo modo que ahora quieren destruir. Siempre los mismos: los politicastros que ponen el Estado a su servicio de modo que no hay manera de echarlos ni en las urnas. Y la raíz de todo es, precisamente, lo que le gusta a Caparrós: la intervención gubernamental, que siempre o casi siempre es sectaria/partidaria (mucho y mal, como los K en Argentina; o poco y normal, como la reforma sanitaria de Obama en EEUU).
4. El cuerpo le pide a uno aliviarse y gritar: jódanse el grupo cual y el grupo tal, les está bien empleado. Lógico. ¿Arregla algo esa actitud visceral? No. Esos grupos tienen enmienda, la propiedad estatal casi nunca se enmienda: ahora sirvo a una secta/partido y mañana a otra/otro. Prefiero que los medios los corrompan sus dueños antes que el Gobierno de turno. Y siempre habrá alguien, como GP o como Caparrós, que podrá denunciar esos abusos.
5. Los grupos monopólicos, oligopólicos, etc. ¿advertirán que el tiempo de manejar la información a su gusto y según sus intereses toca a su fin? ¿que hay MUCHA competencia informativa? ¿que muchos cuentan lo que ocultan y les sacan los colores? Esa competencia irá a más, no a menos. Sus lágrimas de hoy ¿son de cocodrilo o indican que se comportarán como lo que son: voz de los ciudadanos? Esperemos.
6. Me gustaría leer una segunda parte donde Martín Caparrós ofrezca salida, solución.
3 comentarios:
1. Comenta una "rosarina de 56 años": Martín Caparrós ¿¿¿sabe que impresión me dio su artículo???? que Ud. queda bien "con Dios y con el diablo" […]. Estoy de acuerdo.
2. Niego la mayor: no es lo mismo que las empresas de medios se comporten como bergantes a que lo haga el Gobierno. Los medios propiedad del Estado nunca funcionan –o bien: dígame alguien dónde funcionan.
3. El monopolio es una situación que construyeron del mismo modo que ahora quieren destruir. Siempre los mismos: los politicastros que ponen el Estado a su servicio de modo que no hay manera de echarlos ni en las urnas. Y la raíz de todo es, precisamente, lo que le gusta a Caparrós: la intervención gubernamental, que siempre o casi siempre es sectaria/partidaria (mucho y mal, como los K en Argentina; o poco y normal, como la reforma sanitaria de Obama en EEUU).
4. El cuerpo le pide a uno aliviarse y gritar: jódanse el grupo cual y el grupo tal, les está bien empleado. Lógico. ¿Arregla algo esa actitud visceral? No. Esos grupos tienen enmienda, la propiedad estatal casi nunca se enmienda: ahora sirvo a una secta/partido y mañana a otra/otro. Prefiero que los medios los corrompan sus dueños antes que el Gobierno de turno. Y siempre habrá alguien, como GP o como Caparrós, que podrá denunciar esos abusos.
5. Los grupos monopólicos, oligopólicos, etc. ¿advertirán que el tiempo de manejar la información a su gusto y según sus intereses toca a su fin? ¿que hay MUCHA competencia informativa? ¿que muchos cuentan lo que ocultan y les sacan los colores? Esa competencia irá a más, no a menos. Sus lágrimas de hoy ¿son de cocodrilo o indican que se comportarán como lo que son: voz de los ciudadanos? Esperemos.
6. Me gustaría leer una segunda parte donde Martín Caparrós ofrezca salida, solución.
Quiero hablar con Ud. Saludos.
Jolu: paperpapers2@gmail.com
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