El año pasado
ya conté que en la Argentina no hay diarios el 25 de diciembre ni el 1 de enero. En Estados Unidos y en muchos otros países en los que la Navidad es la fiesta más importante del año, lo que hay son
calendiarios. Ayer me tomé el trabajo de bajar unos cuantos: las portadas de los más locales son postales de Navidad (una tarjeta de saludo a sus lectores) y a ninguno le falta el motivo navideño en una historia y en el logotipo. Ahí los tienen:
Siempre hay que tener una historia de Navidad. Perdón: siempre hay que tener una HISTORIA, en Navidad también.
De los que pude ver, solo el
New York Post (¡reflejos Murdoch!) llegó a tiempo con el episodio en el inicio de la Misa de Gallo de Benedicto XVI.
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