El papel no es el único insumo básico para hacer diarios. También habrá que declarar de interés público a la tinta, el agua, las rotativas, la electricidad que usamos para moverlas, los periodistas y los gráficos, las computadoras, las antenas, las líneas telefónicas... y la distribución y la venta.
En la Argentina la distribución y venta de diarios y revistas todavía es rehén de un sistema mafioso, mucho más grave que monopolio de la producción de papel. Y está defendido por una ley que otorga privilegios sindicales a pequeños y medianos cuentapropistas. No solo son sindicales esos privilegios, también son antirepublicanos: las paradas se trasmiten hasta el quinto grado de consanguinidad, como si fueran condados.
Todos los diarios están secuestrados por ese sistema perverso que impide que haya verdaderos populares y gratuitos en la Argentina. Además es la causa principal de la escasa circulación y del alto precio de los diarios y revistas ya que siempre han preferido vender menos ejemplares a mayor precio para trabajar menos.
Deberíamos aprovechar el ímpetu igualador y humanitario para ir por más.
¿Peleará la prensa proveedora del poder por esta bandera? Debería hacerlo.
NOTA: Página 12 podría informar de dónde tomó esa foto para que el gremio gráfico denuncie a esa empresa por no cuidar normas elementales de seguridad.
6 comentarios:
Interesante lo que decís.
Y casi gracioso el último comentario.
Gracias Paco, supongo que te referís al párrafo sobre el pobre tipo que rueda una bobina que lo puede aplastar. Espero que sea una fábrica de papel tissu (esas bobinas no son de papel para diarios).
En este caso, también sería de interés que alguna corporación de fotoperiodistas denunciara a la manipulación de la foto: es como poner unos muertos afganos de 2006 en un atentado de 2010 en Bagdad. ¿No?
Bueno. Es una señal de que los editores de Página 12 nunca vieron imprimir un diario.
Esto había sido desregulado en los inmencionables 1990s, ¿no?
Todo menos eso.
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