No le parece a uno de recibo este tratamiento jijí-jajá de China ni cree que fuera bien recibido por sus ciudadanos (¿o debo decir "súbditos"?). Típico 'Izquierda Exquisita', la 'Sinistra Kashmir', que dicen en Italia o la 'Gauche Caviar' en Francia. No entiendo cómo Ai Weiwei se ha prestado a eso, que se acerca más a la payasada que a la reivindicación. Él, que ha sufrido directamente la arbitrariedad del régimen que aherroja a sus compatriotas (y a nuestros colegas, por ejemplo y por ejemplo, y son suaves). Tampoco entiendo cómo Libé ha traspasado la línea entre la ironía crítica y la frivolidad superficial. Lo del "póster central" es de traca, vamos. Signos de los tiempos. Quizás no lo pensaron bastante, ni el artista ni los periodistas. En fin, quizá está uno de mala onda o no está a la altura de esta genialidad.
2 comentarios:
Weiwei ha visto pasta y punto. A la mierda los principios. Es la gran contradicción del liberalismo (y el "pop") chino: Se venden muy barato a un poder que te clava tu precio con ventaja. Y el resto del mundo aplaudiendo.
Weiwei ha visto pasta y punto. A la mierda los principios. Es la gran contradicción del liberalismo (y el "pop") chino: Se venden muy barato a un poder que te clava tu precio con ventaja. Y el resto del mundo aplaudiendo.
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