1. El documental ha sido encargado por la Presidencia de la Nación y producido por la TV Pública, en abierta pelea con el Grupo Clarín desde mediados de 2008. A pesar de eso no evade su antigua amistad con el grupo y da una explicación por lo menos tan convincente como la que da Clarín.
2. Tiene buenos testimonios y documentos más que interesantes. Especialmente los de Garciela Mochkofsky y Martín Sivak entre los periodistas, de Guillermo Mastrini entre los académicos y de Guadalupe Noble y Oscar Camilión entre los protagonistas. Faltan testimonios de adentro de Clarín, o de gente que quiera a la empresa o amigos de los propietarios. No vale solo Osvaldo Papaleo hablando de Papel Prensa y Juan Sasturain es un cómico que está de más. Horacio Vertbisky y Pablo Llonto están claramente de un lado en esta pelea, pero se nota el esfuerzo por mantener cierta neutralidad y creo que sus testimonios son buenos, igual que los análisis de Alejandro Horowicz y Martín Becerra. Vertbisky debería aclarar que relata hechos que conoce por su parentesco político con Bernardo Sofovich.
3. Después de ver el documental queda la misma sensación que siempre se siente al acercarse a Clarín. Todo es complicado y nada es lineal. Parece la familia del Pato Donald que sigue un sistema de información soviético. Pocas cosas se pueden mostrar a la luz del día y siempre hay que dar explicaciones. El diario debería ser de los herederos naturales de Roberto Noble, pero no es ni de su viuda ni de su hija. Hasta el mismo matrimonio de Ernestina y la adopción de sus hijos son parte de una estrategia política y empresaria casi imposible de desentrañar. En el centro de toda la historia aparece Héctor Magnetto: un personaje inhumano y desentrañable; un intocable sin genealogía ni descendencia que se quedó con todo según una estrategia de acumulación idéntica a la de la política de verdad. Pero a todo esto ya lo sabíamos.
4. Reafirmo una vez más mi seguridad de que la dirección del Grupo Clarín ha errado su objetivo hace muchos años. Insisto es que tiene todo el derecho a defenderse en los tribunales, pero el problema es político y no jurídico: la acumulación de poder fáctico en la Argentina es esencial en la estrategia política de los Kirchner. Clarín ha jugado en esa cancha mucho tiempo con la complicidad de presidentes, dictadores, políticos, ideólogos, sargentos y funcionarios de todo pelaje. Ahora solo le queda la estrategia jurídica porque no tiene ninguna autoridad moral para hacerlo en la política ni en la opinión pública. No pueden quejarse del relato del gobierno cuando ellos mismos han reinventado una y otra vez su propia historia desde el nacimiento del diario.
5. Está en su código genético: Clarín es un alacrán que se envenena con su propio aguijón y eso ya no tiene remedio. Tal cual: es el típico invento argentino.
4 comentarios:
La cagastes al final. No asumo en lo más mínimo que Clarín sea un producto de la "inteligencia" colectiva del país.
No contribuí nunca al diario, es decir nunca lo compré y así mucha gente tanto por imposibilidad económica como, en mi caso, por rechazo ideológico.
Eso correrá por tu cuenta y cargo y creo que si Clarín no tiene la altura moral que bien marcás, menos la tenes vos para señalizar eso y adosarnosló a todos y quién te señaló como el indicado, en todo caso, para hacerlo? Parece además que hubieras nacido en Groenlandia, no te incluís en el texto ni en el párrafo.
No, Clarín es un invento de Clarín, si, es parte de lo que supimos conseguir, pero mal de mucho consuelo de tonto y no asumo, ni mucho menos lo tiene por qué asumir las generaciones que vienen detrás nuestro que Clarín sea producto de nuestra "inteligencia".
Además no es válido sólo marcar como invento colectivo a Clarín y sólo aquello que averguenza, por qué no asumir y señalar al mismo tiempo por ejemplo a Mafalda como producto de la inteligencia colectiva.
El documental esta bien producido pero no señala nada nuevo, es más de lo mismo de siempre. Aporta poco, ilustra un poco más pero no ahonda en la construcción del poder de Clarín después de Noble, es decir, todo bien Clarín es una mierda pero les sirvió a muchos políticos, no sólo a los desarrollistas, solo se muestra como Clarín se aprovecho y se hizo fuerte, pero y del otro lado? no se muestra o relata como se aprovecharon del otro lado los políticos del medio, como se construyeron imágenes políticas como contrapartida de poder.
Buena idea Anónimo. Pero no puedo poner todo...
Agrego algo de la complicidad de los políticos con esa acumulación de poder de la que antes de Néstor usufructuaron Perón, Frondizi, Frigerio, Alfonsín, Menem...
Lo de la inteligencia colectiva es una idea fija mia. No tiene nada que ver con vos o conmigo pero lo saco porque se ve que no se entiende.
Ni atiendo a la crítica de quien escribe "cagastes". Barajemos y demos de nuevo.
Gonzalo, siempre un señor contestando. Valoro tu altura.
pd: qué me contás de esto??
jaja
será verdad?? o estará trucada?
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