miércoles, 29 de enero de 2025
lunes, 27 de enero de 2025
El País celebra que perdió 75 % de sus lectores
El País de Madrid celebró ayer los 400.000 suscriptores. La noticia está abajo, en el zócalo de la portada y explican que los 400.000 son significativos porque están igualando el número promedio de ejemplares vendidos en su récord de 1989. El récord fue de 450.175 pero el promedio de ese año se calcula redondo en esos 400.000.
viernes, 17 de enero de 2025
El costo real de la guerra
domingo, 12 de enero de 2025
martes, 31 de diciembre de 2024
Lanata y la democracia
Lo que quiero contar es que el periodismo argentino salvó a la democracia argentina, y en esta tarea de próceres, Jorge Lanata tuvo, lejos, el papel más destacado entre los periodistas que lo fueron de verdad y que fueron pocos, bastante menos de los necesarios, cosa que dio a Lanata el protagonismo que tuvo, quizá sin quererlo.
A los 50 Lanata decía que ya era hora de dejar de lado los miramientos y empezó a decir por radio y televisión lo que pensaba, sin filtro. Tan sin filtro que fue el periodista que impuso el lenguaje que hoy ocupa casi todo el periodismo argentino, el que hablamos todos, aunque sea un poco zafado.
Después de la pelea del Grupo Clarín con los Kirchner, allá por marzo de 2008, Lanata tuvo el espacio y el capital que necesitaba para investigar la corrupción en el poder. Lo aprovechó al máximo en una emisora de radio y un canal de televisión del grupo. Pero tampoco importa ahora ese u otro programa de televisión o de radio, los diarios o las revistas que fundó, o los libros que publicó. Ni importa –no me importó nunca– cuál era el pensamiento político de Lanata y si coincidía o no coincidía con el mío.
Como todo ser humano, Jorge Lanata fue cambiando durante sus 64 años. Digan lo que digan de él, en la etapa de su vida que se quiera recortar, Lanata fue siempre fiel a lo que le dictaba su conciencia, formada de contrastar la realidad con su pensamiento, aunque eso le costara cambiar su pensamiento cuando estaba equivocado. No conozco tanto de su vida como para decir que hay algo que nunca hizo, pero igual me atrevo a decir que desde que cumplió 50 años, nunca adaptó la realidad a sus caprichos. Y su modo de acercarse a la realidad era como el de los artistas: pasional, fuerte, vital, enérgico. Por eso los artistas dicen verdades que nadie más puede decir y ven siempre más allá que el resto de los mortales.
Cuando digo que el periodismo salvó la democracia argentina digo también que no la salvaron los empresarios, ni los militares, ni los sindicatos, ni los jueces, ni las universidades, ni otras instituciones que podríamos suponer que deberían intentarlo. Mucho menos los políticos. Los medios, en general, no hicieron mucho esfuerzo, pero soy injusto si no cito el compromiso de dos empresas periodísticas: La Nación y Clarín. Y para seguir siendo justo debo decir que, mientras le convino, Clarín fue socio de quienes atentaron contra nuestra democracia intentando instalar el socialismo populista en la Argentina.
La democracia argentina, pero también la de cualquier lugar del mundo, necesita periodistas apasionados por la verdad, como Lanata. Donde flaquean las instituciones, como ocurre a menudo en nuestra América, ellos son la mejor garantía para la democracia.
domingo, 29 de diciembre de 2024
Así se corta una foto
Poco más para decir. Solo que sigue al pie de la letra el consejo de Tim Harrower: corte sin piedad y agrande sin vergüenza.
lunes, 9 de diciembre de 2024
El periodismo en la era de la política cuántica
viernes, 29 de noviembre de 2024
La foto del surfer volador
viernes, 8 de noviembre de 2024
Jeff Bezos tenía razón
La elección que terminó el martes pasado en los Estados Unidos ha dejado varias consecuencias que me parece interesante revisar desde el periodismo.
1. En plena campaña el dueño del Washington Post decide que ese periódico no va a apoyar a ningún candidato porque entiende que los periodistas están hablando de ellos mismos y no de lo que a la gente le interesa. La decisión sorprende porque el WaPo siempre apoyó a los candidatos demócratas y provoca críticas y protestas de periodistas como Martin Baron, antiguo Director del periódico, que calificó de cobardía la actitud de Jeff Bezos. Visto después de la elección, Marshall McLuhan diría que Bezos es el Michael Faraday de nuestra era, porque vio lo que los periodistas no ven, y lo vio por no estar encasillado en las categorías endogámicas y escoradas hacia el falso progresismo de la profesión y de la industria.
2. Muchos –diría que casi todos– los periodistas y sus medios apoyaron a Kamala Harris, pero atacando a Donald Trump, de quien dijeron que es fascista, populista, nazi, antidemocrático, monstruo, criminal... Les subo estas portadas, anteriores a la elección, como botones de muestra:
La novedad de Donald Trump, Javier Milei, Nayib Bukele, Viktor Orbán o Giorgia Meloni –cada uno con su realidad y su estilo– es que a las izquierdas ya no se las enfrenta desde ese centro acomplejado sino desde la derecha sin complejos, que los que la van de moderados se empeñan en prefijar con ultra y extrema, cuando no adjetivar como fascista sin ninguna vergüenza.